A Beethoven

Gerardo Diego

Esa luz sobre el mundo, esa alegría
que del dolor brotó, firme e ilesa,
y ese tullido éxtasis, y esa
giratoria guirnalda noche y día,

y esa música, en fin, ¿es que reía
Julieta así, miraba así Teresa?
¿Son ellas? ¿Eres tú? ¿Qué fiel promesa
ilumina esas nubes todavía?

Contigo voy, a navegar los lagos
de tus sonatas, cálidas de halagos,
madres de almas salvadas de la nada.

Que al vuelo de la noche desvaría
esa música o lumbre enamorada,
la luna: quasi una fantasía.


Gerardo Diego (Santander, 1896-Madrid, 1987)

Comparte

Deja un comentario